En declaraciones tras la reunión de la Mesa, el presidente ha valorado "el compromiso de todos" al firmar la declaración final en la que se recoge, entre otras cosas, la lucha unánime contra el déficit, un mensaje claro dirigido a Europa y a las instituciones europeas.
"Hubo por encima de cualquier otra cosa sentido de la responsabilidad y prueba de ello es la declaración conjunta que acordaron y firmaron a propuesta del Gobierno todas las Comunidades, dando prioridad a algo fundamental para los españoles, buscar caminos de salida de la crisis", ha añadido.
Por ello, ha calificado de "éxito" el contenido político de la reunión, como también lo fue la propia organización. De hecho, el presidente del Senado ha propuesto en la Mesa una felicitación y agradecimiento a todo el personal de la Cámara porque "salió todo a la perfección organizativamente".
García-Escudero ha apostado también por que la Conferencia se celebre "por lo menos" una vez al año --"sería lo deseable"--, y siempre que el presidente del Gobierno lo considere necesario porque la actualidad política lo reclame.
Por úlitmo, ha defendido que sea el Senado el punto de reunión, por considerarlo "terreno neutral" para Gobierno y Comunidades Autónomas e "instrumento de cooperación" entre territorios y entre estos y el Ejecutivo. Sin embargo, ha descartado que la institución pueda tener otro papel más allá que el de sede de la reunión. "La Conferencia es una reunión de ejecutivos, el Senado es legislativo. Es difícil, se produciría una mezcla entre poderes", ha dicho.