De este modo se han pronunciado tanto García-Page como Molina, después de firmar en las Cortes, ante notario, el acuerdo suscrito entre ambas formaciones, que posibilitará que el candidato socialista alcance la Presidencia de Castilla-La Mancha.
García-Page ha dicho que este acuerdo tiene "permanencia" por el deseo y la necesidad que comparten ambos partidos de cambiar el modo de hacer política en la región y sobre todo de atender la situación de "crisis social" que afecta a muchos castellano-manchegos.
(Habrá ampliación)