El diputado general de Guipúzcoa, Martin Garitano, ha recibido en San Sebastián a las familias de los presos de ETA encarcelados en la prisión de Sevilla y que este jueves han puesto fin a la huelga de hambre que mantenían desde hace 32 días para denunciar su régimen de "incomunicación" y las condiciones en las que se encuentran.
La recepción ha tenido lugar a las diez de la mañana de este jueves en el Palacio foral de la capital guipuzcoana, con el objetivo de conocer la situación de las familias de los reclusos, después de que hayan abandonado su ayuno "por motivos de salud", según ha explicado el colectivo de familiares y allegados de presos de la banda Etxerat.
Garitano ha explicado que el encuentro se ha desarrollado para "recabar información de primera mano sobre la inquietante situación" en la cárcel de Sevilla II y del estado de los seis presos que han mantenido una huelga de hambre hasta este jueves.
Además, ha señalado que, una vez conocido que después de 32 días han dejado su ayuna, la Diputación coge "el testigo" y realiza "un llamamiento al resto de instituciones y a la ciudadanía a mover al Gobierno español para que abandone una política estéril, vengativa y que no nos conduce a dinámicas de progreso en el proceso de normalización política en Euska Herria".
FAMILIARES
Por su parte, Enara Izagirre, pareja del preso Gurutz Agirresarobe, ha explicado que se los familiares y allegados se encuentran "preocupados" por la salud de sus familiares ya que, pese a haber abandonado la huelga, la situación en Sevilla II "sigue igual o peor".
En ese sentido, ha asegurado que los reclusos, que han dejado la huelga "por problemas de salud" y "no porque su situación haya mejorado", van a continuar "luchando y llamando a todas las puertas", al tiempo que les han pedido "ayuda" para "dar la vuelta a esta situación".