El Gobierno niega su culpa en el espionaje y plantea una reforma del ente de inteligencia

EFE 24/02/2009 03:42

El presidente colombiano, Álvaro Uribe, dijo que él no ordenó las escuchas realizadas por el Departamento Administrativo de Seguridad (DAS), ente de inteligencia, y agregó que él mismo se siente "víctima de esta infamia".

En un comunicado enviado exclusivamente a la emisora RCN, Uribe expresó su indignación después de que la revista Semana publicara el pasado sábado que desde el DAS se grababan conversaciones telefónicas a políticos, periodistas, juristas, militares y funcionarios.

En consecuencia, el Gobierno autorizó a la Fiscalía y a la Procuraduría General de la Nación que investigaran lo ocurrido, lo que llevó al registro de las oficinas del DAS, organismo creado hace más de 50 años y que depende directamente de la Presidencia.

A causa del escándalo, el subdirector de Contrainteligencia del DAS, Jorge Alberto Lagos, dimitió ayer tras ocupar el cargo durante más de tres años y llevar a cabo diferentes tareas en el servicio de inteligencia en los últimos doce años.

Uribe se declaró "profundamente dolido" y calificó a los autores de las grabaciones ilegales de "banda mafiosa que le hace daño por igual a la democracia colombiana, a la libertad, al país y al propio Gobierno".

"Jamás he dado ni una sola orden para que se vigile la vida privada de las personas. Soy un hombre leal que juega limpio con sus opositores y no les hace trampa", expresó el jefe de Estado.

La mayoría de los equipos de interceptación telefónica que son usados por el DAS fueron entregados por las agencias de cooperación de inteligencia de Estados Unidos y del Reino Unido.

Por eso, el embajador de Estados Unidos, William Brownfield, dijo que si ha habido entrega de ese tipo de equipos pero advirtió que el objetivo "principal, fundamental y único es resistir, combatir y derrotar eventualmente el narcotráfico, la delincuencia internacional y el terrorismo".

Aunque la denuncia sobre ese tipo de interceptaciones no es nueva, ya que ha habido episodios similares en los últimos tres años, esta vez sorprendió que entre los teléfonos pinchados estuvieran los de varios colaboradores del propio gobernante, incluido su jefe de seguridad.

Según la revista Semana, entre las personalidades interceptadas ahora se encuentran el ministro de Defensa, Juan Manuel Santos; el secretario general de la Presidencia, Bernardo Moreno; el director de la Policía, general Óscar Naranjo; y el encargado de la seguridad de Uribe, general Flavio Buitrago.

También el ex presidente del Senado y posible candidato a la jefatura del Estado Germán Vargas Lleras, antiguo aliado de Uribe; el ex mandatario César Gaviria (1990-94) y el ex titular de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) Francisco Javier Ricaurte, quien ha mantenido fuertes discrepancias con el gobernante.

Gaviria comparó las escuchas ilegales del DAS con el espionaje que realizó Vladimiro Montesinos, el asesor de inteligencia del ex presidente peruano, Alberto Fujimori, e indicó que la falta de control por parte de Uribe sobre esa institución "es impresionante e injustificada".

Ricaurte también se pronuncio en un comunicado en el que condenó el espionaje y seguimiento del que han sido víctimas los magistrados de la CSJ y reclamó un pronto resultado de las investigaciones.

"Tales comportamientos punibles constituyen una degradación del Estado de Derecho y un leve atentado contra la democracia y la libertad de opinión", dijo el magistrado.

El ministro de Interior y Justicia, Fabio Valencia, respondió a Ricaurte y le dijo que la CSJ "está reclamando lo mismo que ha reclamado el Gobierno"

"Nosotros no solamente nos solidarizamos con la Justicia, con el Congreso, con los periodistas, sino que además somos víctimas de esa misma mafia y del mismo atropello y de la misma ilegalidad", afirmó el funcionario.

Entre tanto, el ministro de Defensa reiteró que existe "un grupo de gente criminal incrustada dentro del DAS" y subrayó que "eso para la seguridad nacional es muy grave".

"Creo que eso viene de tiempo atrás, que están haciendo el juego sucio a mucha gente, incluyendo gente que está al servicio del narcotráfico. No me cabe la menor duda que también con la guerrilla, con todos los enemigos del Estado", dijo Santos.

En tanto, Bernardo Moreno, secretario general de la Presidencia y otro de los interceptados, declaró que el DAS "necesita una cirugía muy de fondo".