El independentismo catalán se mantiene y baja a octava fuerza

EUROPA PRESS 21/11/2011 08:20

Con el 99,72 por ciento de los votos escrutados, el candidato de los republicanos, Alfred Bosch, ha logrado igualar los resultados de su predecesor, Joan Ridao, quien en las últimas elecciones logró tres escaños y un 1,16 por ciento de los votos en España.

Los resultados de la formación independentista en las últimas diez elecciones se ha mantenido en un escaño, a excepción de 1986 y 1989, cuando no obtuvieron representación, y 2004, cuando bajo el liderazgo de Josep Lluís Carod-Rovira alcanzaron los ocho escaños.

En las primeras elecciones de la democracia española, en 1977, ERC se presentó como Esquerra de Catalunya coaligada con el Front Electoral Democràtic, y con Heribert Barrera como candidato obtuvo un escaño (el 0,79 por ciento del total de votos en España y novena fuerza).

En las siguientes, en 1979, y aún con Barrera como 'número uno', los independentistas mantuvieron la misma representación y el 0,69 por ciento de los votos, aunque bajaron a décima fuerza.

En 1982 y bajo la candidatura de Francesc Vicens, volvieron a repetir un escaño y se llevaron el 0,66 por ciento de los votos, subiendo otra vez a noveno partido con más representación.

Vicens repitió en 1986 con desigual resultado: el 0,42 de los votos no se tradujo en escaños, y por primera vez en su historia, el independentismo catalán quedó fuera del Congreso, bajando al número 16 en la escala de partidos.

Los malos datos se repitieron en 1989, esta vez con Joan Hortalà, actual presidente de Bolsa de Barcelona, como candidato, quien tampoco consiguió representación, y su 0,41 por ciento de votos bajó a los republicanos al puesto número 18.

INFLEXIÓN

La candidatura de Pilar Rahola en 1993 supuso un acicate para los independentistas, ya que la formación recuperó su histórico escaño y subió hasta convertirse en la octava fuerza, con el 0,8 por ciento de los votos.

Rahola repitió en 1996 con un 0,67 por ciento, lo que permitió mantener el escaño, aunque bajó a la formación un puesto en la escala de partidos con más representación.

Resultados parecidos obtuvo Joan Puigcercós en los comicios del año 2000, donde el partido conservó su escaño con un 0,84 por ciento, siendo otra vez novena fuerza.

En 2004, la candidatura encabezada por Josep-Lluís Carod-Rovira dio los mejores resultados en democracia para el independentismo catalán, pasando de uno a ocho escaños y alcanzando el 2,52 por ciento de los votos, lo que convirtió a ERC en la cuarta fuerza política a nivel estatal.

En los siguientes comicios, en 2008, la lista liderada por Joan Ridao no logró revalidar los buenos resultados de Carod, y redujo su representación a tres escaños, con un 1,17 por ciento de los votos.