Jacob Zuma, elegido cuarto presidente democrático de Sudáfrica

AGENCIA EFE 06/05/2009 14:28

La elección de Zuma, que será investido presidente el próximo sábado en Pretoria, se produce tras una milagrosa resurrección política, después de que, en 2005, el entonces jefe del Estado, Thabo Mbeki, lo destituyera de la Vicepresidencia al sospechar que había cobrado sobornos de una empresa de armas francesa en 1999.

El pasado 6 de abril, a 16 días de los comicios, la Fiscalía General retiró los cargos de corrupción, fraude, extorsión y blanqueo de dinero contra él, al considerar que hubo manipulación en el proceso, lo que le permitió llegar a las urnas libre de trabas legales, aunque no de sospechas, tras ocho años de acusaciones.

La elección de Zuma se produjo tras la constitución de la Asamblea Nacional, elegida en los cuartos comicios democráticos del país, celebrados el pasado 22 de abril y en los que el CNA obtuvo la mayoría absoluta, con 264 de los 400 escaños de la Cámara.

Zuma contó con 277 votos, mientras que el principal partido de la oposición, la Alianza Democrática (DA), con 67 escaños, se abstuvo, y el segundo, el Congreso del Pueblo (COPE), con 30, voto a su propio aspirante, Mvume Dandala, que también consiguió otros 17 sufragios y llegó a los 47 votos.

La propuesta oficial para la elección de Zuma como presidente, en nombre del CNA, la hizo Winnie Mandela, ex esposa del primer presidente negro de Sudáfrica, Nelson Mandela, elegido en 1994 tras la caída del régimen segregacionista del "apartheid".

Winnie Mandela, condenada por diversos delitos graves, entre ellos el de corrupción, en dos juicios distintos, ha sido elegida la quinta asambleísta en las lista nacional del CNA, hecho que también ha provocado las criticas de la oposición, que pone en cuestión la honradez del partido.

En el nuevo Parlamento, el CNA tiene la mayoría absoluta, pero no alcanza los dos tercios de escaños que le permitirían reformar la Constitución sin alianzas y queda por debajo de los 279 asambleístas que tenía en la legislatura anterior.

Tras quince años de democracia dominada por el CNA, Zuma, que lidera el ala izquierda del partido, tiene ahora el reto de combatir la pobreza que aún aqueja a gran parte de la población, aumentar el empleo, mejorar los servicios sanitarios, la educación y ofrecer viviendas dignas a una buena parte de los sudafricanos.

El próximo domingo, Zuma designará su nuevo gabinete y se sabrá que carteras repiten y cuales tiene nuevos titulares, y los ministros tomarán posesión el lunes, según informó el Departamento de Comunicación del Gobierno.

Hoy mismo, los gobiernos de las nueve provincias de Sudáfrica, elegidas también el pasado 22 de abril y de las que ocho están también dominadas por el CNA, se constituyeron y designaron a sus gobernantes.

Por primera vez en la historia de Sudáfrica, la mayoría de los gobiernos provinciales, cinco de ellos, estarán encabezados por mujeres, incluido el de Cabo Occidental, donde se encuentra Ciudad del Cabo, el único no dominado por el CNA, que será presidido por Helen Zille, la líder de la opositora Alianza Democrática.

Zille, que era alcaldesa de Ciudad del Cabo, obtuvo más del 51 por ciento de votos en Cabo Occidental en los pasados comicios y hoy fue elegida, en medio de aplausos, jefa del Gobierno de la provincia con el voto de 24 de los 42 legisladores de la Cámara.

Tras la designación de sus candidatos a encabezar los gobiernos de las ocho provincias en las que ganó los comicios, la Ejecutiva Nacional del CNA, que lidera Zuma, encontró la oposición de algunos grupos internos.

Uno de los casos fue el de las Juventudes del CNA en Gauteng, que se opusieron a la designación de Nomvula Paula Mokonyane como jefa del Gobierno de la provincia donde están Johannesburgo y Pretoria, pero que abandonaron la polémica tras ser advertidos por el propio Zuma de que sus objeciones chocaban con las decisiones del grupo.

La mayoría de los medios de comunicación locales han achacado a "intereses" enfrentados dentro del partido las objeciones a algunos de los jefes de gobierno provinciales, mientras que algunos comentaristas han apuntado al "machismo" del CNA como motivo para oponerse a algunas de las designadas.