Los hechos sucedieron en abril de 2010. El acusado llamó por teléfono a la víctima para "concertar con ella un servicio de naturaleza sexual", según las conclusiones provisionales del fiscal, que señala que fue a recogerla para ir luego juntos al domicilio particular de éste, ubicado en la localidad malagueña de Mijas.
Una vez avanzada la noche, se produjo una fuerte discusión motivada por el precio del servicio, relata la acusación pública en su escrito, al que tuvo acceso Europa Press, en el que se precisa que "con ánimo de quitar la vida" a la mujer, "la emprende a golpes contra ésta en la cara y en la cabeza".
Así, la Fiscalía sostiene que la dejó "sin vida", tras lo que, para deshacerse del cadáver, fue a una ferretería de Mijas-Costa y compró un serrucho, con el que al día siguiente comenzó "a seccionar en trozos el cuerpo" y distribuirlos en varias bolsas que metió en su maletero del coche y arrojó en dos contenedores de basura.
También había comprado en un estanco dos botes de gasolina, con la que en un descampado de Mijas (Málaga) quemó la ropa y el bolso de la mujer para hacer desaparecer estos objetos, indica el ministerio público, que acusa al hombre de un delito de homicidio y solicita 14 años de prisión.
En cuanto a la responsabilidad civil, la acusación pide que el acusado indemnice a los herederos de la víctima con la cantidad de 300.000 euros. Tras la selección del Tribunal que formará el jurado popular, el juicio comenzará con la lectura de los escritos de las partes y con la declaración del acusado.