Así lo informó hoy el ministro de Gobierno (Interior), Gustavo Jalkh, tras señalar que la decisión intenta dejar en libertad a Correa para que organice, con libertad, al equipo de colaboradores que escoja para llevar adelante la nueva etapa en el Ejecutivo.
Tras concluir hoy el escrutinio preliminar de las elecciones presidenciales del pasado 26 de abril, Correa obtuvo el 51,9 por ciento de la votación, lo que confirma su reelección para un periodo de cuatro años.
Con esa victoria, Correa pretende profundizar la "revolución ciudadana" que lleva adelante desde enero de 2007, cuando asumió por primera vez el mando del país, con el objetivo de acometer un cambio "profundo, radical y rápido", bajo el manto de una nueva Constitución, aprobada en referendo en septiembre pasado.
"Creo que la mayoría de ministros ha presentado sus renuncias, porque nos parece que es un gesto importante frente al inicio de una nueva etapa de la 'revolución ciudadana' y el deseo de cambio del pueblo ecuatoriano", sostuvo Jalkh.
"Se han dado todas las facilidades para que (el Presidente) tome las decisiones que él considere pertinentes" en cuanto al equipo de colaboradores que le acompañará en el futuro, agregó Jalkh.
La puesta de los cargos a disposición de Correa no supone, necesariamente, que los actuales ministros vayan a salir, ya que podrían ser ratificados por el mandatario, indicaron fuentes periodísticas, que estiman que el jefe del Estado se tomará algunos días más para determinar los eventuales cambios en el Gabinete.