Moratinos expresa su orgullo a las tropas en la recta final de su misión en Bosnia

AGENCIA EFE 21/05/2009 05:46

Moratinos puso fin de esta manera a su visita a Bosnia-Herzegovina, donde se reunió con las principales autoridades del país, dentro de la gira por los Balcanes que le llevó también a Albania.

El jefe de la diplomacia española llegó al campo de Butmir, el cuartel general de la fuerza multinacional situado a las afueras de Sarajevo, donde fue recibido por el comandante adjunto de EUFOR, el general español José Carrasco.

Después de escuchar el himno nacional, Moratinos pasó revista a los soldados y se reunió con los mandos militares de la base para conocer la situación en el país.

España, con 308 militares, incluidos 41 guardias civiles, es el grupo más numeroso de los 2.200 que componen la fuerza multinacional, integrada por 28 países.

En unas palabras ante los soldados, Moratinos se declaró "orgulloso" por ser el grupo más numeroso y les trasladó el reconocimiento del Rey y del jefe del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, por la "calidad" de su contribución.

El acto concluyó con un brindis al grito de "Viva Europa, viva España y viva el Rey".

El actual contingente español será reemplazado a finales de agosto por otra unidad que, según las previsiones de los mandos de EUFOR, cerrará la misión antes de 2010, casi en paralelo al repliegue en la vecina Kosovo.

Los Veintisiete consideran que el grado de estabilidad en Bosnia-Herzegovina hace viable la transición a una operación civil, que tendría como meta el adiestramiento de fuerzas armadas bosnias.

La misión en Bosnia es la más antigua en la que España participa, desde 1992, cuando estalló la guerra con Serbia, aunque su presencia ha ido menguando en los últimos años a medida que se ha reducido la violencia entre las principales comunidades étnicas (musulmana, croata y serbia).

La situación política, en cambio, sigue siendo frágil por la falta de entendimiento entre las dos entidades autónomas del país: la Federación croata-musulmana de Bosnia y la República Serbia de Bosnia o "Srspska", ambas con instituciones propias.

La Presidencia del Estado recae en una "troika" rotatoria cada ocho meses, en representación de los bosnios musulmanes -alrededor de la mitad de los 3,7 millones de habitantes-; los serbios ortodoxos -en torno a un tercio- y los croatas católicos -un diez por ciento- junto a otras minorías.

Moratinos se entrevistó con la junta -compuesta por el serbio Nebojsa Radmanovic, actual presidente en ejercicio; el musulmán Haris Silajdzic y el croata Zeljko Komsic- y con el primer ministro, Nikola Spiric.

Posteriormente, se reunió con el representante internacional y de la UE en el país, Valentin Inzko, encargado de velar por el cumplimiento de la parte civil del acuerdo de paz de Dayton (EEUU), que en 1995 puso fin a tres años y medio del conflicto más trágico en Europa desde la II Guerra Mundial, con 200.000 muertos.

Moratinos les trasladó el mensaje de que España respaldará que Bosnia pueda presentar su solicitud de ingreso a la Unión Europea durante su Presidencia de turno en el primer semestre de 2010, como ya han hecho Croacia, Macedonia, Montenegro y Albania.

Así lo afirmó en la rueda de prensa que ofreció con su colega bosnio, Sven Alkalaj, al que apremió a llevar a cabo las reformas políticas e institucionales precisas para acercarse a la UE y a la OTAN.

"Bosnia puede contar con el apoyo de España en 2010 en todas las etapas y está dispuesta a atender sus objetivos y pretensiones de un país amigo", dijo.

Moratinos aprovechó para anunciar que Sarajevo será la sede el próximo otoño de una reunión de la Alianza de Civilizaciones entre representantes de países balcánicos, donde la convivencia de religiones es una de sus principales señas de identidad social.

El ministro también visitó la Biblioteca de Sarajevo, símbolo de la ciudad que fue arrasada en un incendio durante la guerra y que se está reconstruyendo con ayuda financiera de la Comisión Europea y de países como España.