El Parlamento de Cataluña ha aprobado este viernes la nueva ley de consultas que posibilitará a Artur Mas convocar el referéndum del 9 de noviembre. Tras acabar la votación, el presidente ha sido aclamado a la salida por una multitud al grito de “independencia” a los que les ha prometido ir más allá. Se trata de una euforia difícil de contener entre los suyos y entre quienes han votado con él. Esquerra Republicana, ICV, la CUP y hasta el PSC. A ellos, a los socialistas han tratado de convencer de que cambiara de opinión PP y Ciutadans pero los votos del PSC se han sumado a los de la mayoría proconsulta. La salida ha sido menos amable para quienes se han opuesto a esa ley. La votación se producía alrededor de las siete de la tarde. Tras ese murmullo, algunos diputados no se resistían a inmortalizar el momento con sus teléfonos. El resultado no dejaba sorpresas. Ovación cerrada de dos minutos 39 segundos mientras populares y ciudadanos abandonaban el hemiciclo que se resumía en el gesto de la señal de la victoria que Artur Mas ha hecho al terminar la sesión.