La Mesa de la Cámara Baja aprobó este martes la distribución de los grupos parlamentarios en el Salón de Plenos, y Podemos está en desacuerdo porque les envía a lo que han denominado "gallinero" del hemiciclo, un lugar que consideran que no corresponde a la tercera fuerza política del país.
Esta propuesta de reparto contó con el respaldo de los miembros del PP y de Ciudadanos en el órgano rector de la Cámara, así como de la vicepresidenta segunda, la socialista Micaela Navarro, y el rechazo de los representantes de Podemos. El presidente, Patxi López, por su parte, no participó en la votación ya que defendía, como planteó el partido morado, que la decisión sobre este asunto se tomara más adelante.
AYER SE REUNIERON
Podemos, por boca de su portavoz parlamentario, Íñigo Errejón, ya avanzó este martes su intención de impugnar la decisión de la Mesa y de plantear una alternativa con una nueva ubicación para sus diputados, y así se lo hizo saber al propio López, con el que se reunió en su despacho, acompañado por el portavoz de ERC, Joan Tardà, quien también mostró sus recelos por los escaños reservados para sus nueve diputados.
Este mismo miércoles, Errejón ha entregado al presidente de la Cámara Baja su propuesta, en la que plantea que sus parlamentarios ocupen parte de la bancada del PSOE y de la central. Sin embargo, su alternativa sólo será tomada en consideración por la Mesa si reúne previamente un consenso suficiente, según ha explicado el propio López.