La policía investiga si dos inmuebles de la familia Pujol, valorados en más de un millón de euros, fueron regalos a cambio de adjudicaciones públicas y si hubo blanqueo en la compra de otra casa por seis millones en una zona exclusiva de Barcelona. Una mansión de más de 2 millones de euros pagados en contante. También están en el punto de mira la casa de Oriol en Urús, al norte de Girona o la mansión que Josep posee en la Cerdaña francesa.