El secretario general del PP-A, José Luis Sanz, ha exigido este lunes a la presidenta de la Junta, Susana Díaz, que presente una "memoria económica" sobre el coste que le supondrá a los andaluces los cambios que va a acometer en el Ejecutivo andaluz para comenzar esa "nueva etapa" y ese "nuevo tiempo" que, según temen los 'populares', consistirá en "aplicar las políticas fracasadas de (José Luis Rodríguez) Zapatero".
En rueda de prensa, Sanz ha expuesto la "gran preocupación" que existe en las filas 'populares' no sólo por la "parálisis" que vive a día de hoy la Junta de Andalucía y que suponen que se alargará unos "cinco o seis meses más" hasta que Díaz ejecute todos los cambios en todos los departamentos del Gobierno autonómico, sino también porque ella misma "aspire a ser la heredera" del último expresidente socialista, al que ha definido como "el más insolvente de la historia democrática de España".
Además de este temor a que "todo cambie para que todo siga igual", según ha resumido el 'número dos' del PP-A, se une el de que, de cara al próximo mes de marzo, PSOE-A e IULV-CA acuerden otro posible cambio en el Gobierno tal y como, según Sanz, "ha dado a entender" el vicepresidente de la Junta, Diego Valderas, esta mañana.
Se refería así al hecho de que Valderas haya señalado que sería posible que, "en los próximos seis meses, antes de marzo, podría haber la oportunidad de repensar determinados cambios de nomenclatura que si ahora se dan, serán más bien suaves".
Para Sanz, estas palabras apuntan a la intención del "bipartito" de "volver a reorganizar" la estructura de la Junta dentro de medio año, lo que, a su juicio, sería una "auténtica irresponsabilidad" por parte de Díaz "si de verdad se lo está planteando".
Frente a ello, el 'popular' ha recomendado a la presidenta de la Junta que, en cuanto haga público su Ejecutivo esta tarde, diga en primer lugar "cuánto tiempo más va a estar paralizado el Gobierno andaluz, cuánto nos va a costar el cambio de Gobierno y la reorganización de competencias, así como las llegadas y salidas de nuevos altos cargos" a la Junta. "En definitiva, lo primero que debería aclarar es el coste económico que tienen estos nuevos tiempos", ha resumido tras reiterar su petición de que presente una memoria económica sobre dichos cambios.
PREVÉ UNA "CAÍDA AL ABISMO"
Sobre el hecho de que Díaz haya dicho públicamente que se siente "heredera" de la lucha por la igualdad de José Luis Rodríguez Zapatero, Sanz ha dicho que, si hasta el sábado que pronunció esas palabras temían que fuera la "heredera de las políticas de Griñán", hoy día están "mucho más preocupados" porque aspire a seguir la senda del expresidente y que "Andalucía se convierta en la única y en la última comunidad autónoma que siga aplicando sus políticas fracasadas".
En ese sentido, ha lamentado que la presidenta ya haya "recordado a los mejores discursos de aquellos que hacía Zapatero mientras España sangraba" y que, por contra, "no haya aclarado qué va a hacer para resolver los grandes problemas de Andalucía".
"Los nuevos tiempos nos retrotraen a los tiempos de Zapatero y que afortunadamente ya habíamos superado. Porque el agujero en el que estamos hoy es responsabilidad del presidente más insolvente de la historia democrática de España", ha recalcado para advertir a Díaz de que, si escoge este camino iniciado por el expresidente, "a la incompetencia y parálisis del bipartito" habrá que sumar "la caída al abismo" que, en su opinión, "supondrán las medidas de Zapatero" aplicadas en Andalucía.
Sanz también ha reclamado a Díaz que concrete en los próximos días si se va a dejar aconsejar igualmente por Zapatero en política económica, cómo va a apoyar "de forma decidida" a los sectores productivos andaluces, cómo va a combatir el fracaso escolar o cómo va a pagar a las universidades y a la sanidad pública la "deuda" que mantiene con ellas, así como con los Ayuntamientos.
Cuestionado sobre si espera que la presidenta de la Junta retome el fallido 'Pacto por Andalucía' iniciado por Griñán, Sanz ha dicho que no ha recibido ninguna llamada en ese sentido y que, aún así, lo que el PP-A tiene claro es que de nada sirve reunirse en torno a una mesa durante "casi dos años para no llegar a nada", tal y como, en su opinión, pasó durante la etapa del expresidente autonómico.
"Sería muy bueno que PP-A y PSOE-A llegaran a acuerdos, pero para eso hace falta voluntad de quienes están gobernando", ha apostillado tras señalar que su Grupo Parlamentario "apoyaría" algunas de las medidas planteadas por Díaz sobre transparencia y control de las donaciones en los partidos políticos.