El reparto de escaños en el Parlamento vasco sigue cambiando en favor de las fuerzas constitucionalistas. El PSE que lidera Patxi López suma un escaño más, en total 25, gracias a los residentes que votaron desde fuera del País Vasco. Ahora el candidato socialista, que "se siente legitimizado para formar Gobierno", sólo necesita en su investidura el apoyo del PP. El líder de los populares, Antonio Basagoiti, ya ha reiterado en varias ocasiones que sí le apoyará por el "cambio en Euskadi".
De esta forma, UpyD, liderado por la ex dirigente socialista Rosa Díez, queda fuera de juego. El PSE y PP suman los 38 escaños que otorgan mayoría absoluta en el Parlamento Vasco y por lo tanto, López no necesita el voto de la nueva formación.
Eusko Alkartasuna sale perdiendo con el recuento del voto exterior. Ha perdido uno de sus dos escaños, el que han gando los socisliastas.
Esta mañana, el líder del PNV, Iñigo Urkullu, que el jueves hablaba de golpe Institucional, critica que López defienda su deseo de ser lehendakari "aunque sea con el apoyo del PP y, luego, que sea lo que Dios quiera, sin tener el mayor número de votos, sin tener el mayor número de escaños". En la cadena Ser ha dicho que esto supondría que el PP será "la llave de lo que sea la política de Patxi López".
Precisamente, el jueves, los nacionalistas vascos ofrecían, en el inicio de la ronda de contactos para formar Gobierno, al PSE "un gran acuerdo que dé estabilidad institucional no sólo a Euskadi, sino que también tenga su correspondencia en la estabilidad de otras instituciones, incluso del Estado".