Rajoy quería comenzar de inmediato su trabajo con el nuevo equipo, pero la primera reunión se ha tenido que trasladar al miércoles debido a los compromisos del presidente del Gobierno, que esta mañana tenía cumbre bilateral con el primer ministro portugués, Pedro Passos Coelho y después, el Consejo Europeo extraordinario en Bruselas para abordar la crisis griega.
Por ello, será el miércoles cuando el jefe del Ejecutivo comenzará a hacer efectivo su anuncio de la semana pasada ante la dirección de su partido, al que dejó claro que iba a tomar las riendas del PP tras nombrar un nuevo equipo de vicesecretarios para retomar el pulso de la acción política.
A la reunión de 'maitines' están convocados, además de la secretaria general, los portavoces parlamentarios del Congreso, Rafael Hernando; Senado, Pío García Escudero; y Parlamento europeo, Esteban González Pons, así como los vicesecretarios, los nuevos y el ya veterano Javier Arenas, quien sigue al frente de la vicesecretaría municipal y autonómica.
REUNION DE VICESECRETARIOS EN GENOVA
No obstante, los nuevos vicesecretarios han comenzado ya su trabajo y tras la visita de buena parte de ellos el viernes pasado a la sede de la calle Génova, esta mañana han mantenido su primera reunión para conocerse y empezar a intercambiar opiniones sobre el trabajo que tienen por delante de aquí a las elecciones generales, la primera gran cita en el calendario.
En el citado encuentro estaban los cuatro nuevos nombramientos del presidente, el vicesecretario de Organización, Fernando Fernández Maíllo; la vicesecretaria de Estudios y Programas, Andrea Levy; el vicesecretario de sectorial, Javier Maroto y el de Comunicación, Pablo Casado.
La reunión dio comienzo sobre las doce y media del medio día, aunque el nuevo coordinador de campaña, Jorge Moragas, se incorporó más tarde. A esta hora, el nuevo equipo había prolongado la reunión con un almuerzo.
Las fuentes consultas explican que algunos de los recién nombrados ya han empezado a fijar agenda con el equipo con el que van a trabajar a partir de ahora en Génova. De hecho, han planteado a sus equipos mantener reuniones semanales para abordar todos los asuntos, marcar estrategias y fijar objetivos.
El PP tiene por delante el reto de recuperar el voto que ha ido perdiendo durante las elecciones europeas y las municipales del pasado 24 de mayo, así como volver a ilusionar a la abstención que en los últimos comicios prefirió quedarse en su casa en lugar de ir a votar.
Todos ellos desencantados con la acción del Gobierno popular durante estos últimos años y que Mariano Rajoy atribuyó en su discurso a los ajustes que su Ejecutivo se ha visto obligado a realizar por la crisis económica y a la corrupción que les ha salpicado de lleno.
El objetivo del nuevo equipo lo marcó el presidente el pasado jueves: "ganar las elecciones legislativas" que se celebrarán a finales de año y hacerlo "con toda la claridad" con el objetivo de tener el "margen suficiente para evitar dar marcha atrás". Por ello pidió a todos los cargos del PP que se dediquen "intensamente" a la labor del partido.
Y además, señaló el camino: "todos tenemos que salir más, hablar más, explicarnos y relacionarnos mucho más con todos los españoles, con humildad, con sensibilidad pero también con la firme defensa de nuestras convicciones".