"Hago un llamamiento a todos los partidos políticos y a todos los españoles para que condenen estos actos antidemocráticos cada vez que se produzcan, y que lo hagan sin tibieza y sin incertidumbre. Yo como presidente del Gobierno condeno estos actos y tengo la obligación de garantizar que los ciudadanos puedan ejercer sus derechos en libertad", ha asegurado ante la Junta Directiva Nacional del PP, donde ha cosechado un fuerte aplauso cuando hablaba de este asunto.
Tras apelar a la "prudencia, la sensatez y el sentido común", ha recordado que una mayoría de los ciudadanos les ha elegido en las elecciones "libres y democráticas" porque "han querido", ha criticado duramente que "muchos" de sus compañeros de partido y sus familias estén siendo objeto de "acoso", "intimidación" y "violencia verbal".
"Nadie puede ser acosado, denigrado ni intimidado, y mucho menos aún si el motivo de esa amenaza es haber sido elegido por la mayoría de los ciudadanos. Ése es su pecado y la mayoría no puede ser coaccionado por una minoría", ha proclamado, cosechando de nuevo una ovación de los suyos.
Las preferentes
También se ha referido a las preferentes, un asunto que, según ha dicho, no es "responsabilidad" del PP. "Este asunto de las preferentes es responsabilidad de quien en su día tenía que haber supervisado y no lo hizo", ha declarado el presidente del Gobierno.
No obstante, ha subrayado que están haciendo "todo lo posible dentro de los límites legales de la UE para resolver "este problema" que, según ha insistido, no ha "creado" su partido.