El exalcalde de Sabadell (Barcelona) Manuel Bustos niega ante el juez que el exconcejal Soriano le sobornara

EUROPA PRESS 07/11/2013 21:14

El exalcalde de Sabadell (Barcelona) Manuel Bustos, imputado en el caso Mercurio de presunta corrupción urbanística con epicentro en el consistorio vallesano, declaró ante el titular del Juzgado de Instrucción 1 de la ciudad que el presunto líder de la trama, el exconcejal Jordi Soriano, "nunca ha sobornado".

En su declaración de más de seis horas el 2 de diciembre de 2012, a la que ha tenido acceso Europa Press y que consta en el sumario del caso, le hicieron escuchar decenas de conversaciones intervenidas, y sí admitió que le habían llegado rumores de que Soriano estaba intercediendo en favor de empresarios, pero que lo investigó y no halló nada.

"En ningún caso el señor Soriano ha podido cambiar ni variar ninguno de los procedimientos de adjudicación ni ninguno de los criterios que están sujetos a la ley de contratos de concesión de servicios o adjudicación de obras; en ningún caso", dijo en un momento de su declaración maratoniana, cuando todavía era alcalde, y que empezó a las 20.08 horas y acabó a las 2.16.

En un momento de la declaración, el fiscal Fernando Bermejo le preguntó concretamente si supo que un empresario le entregó a su tío, Melquíades Garrido --presidente del Gremio de Constructores de Sabadell--, un 'pendrive' "en el que se incriminaba a Soriano por el cobro de comisiones a constructores de la ciudad".

Bustos declaró desconocer la existencia del 'pendrive' pero que en cuanto le llegaron estos "rumores" pidió al responsable de Urbanismo, Manuel Somoza, que indagara si es cierto, y que éste convocó a Soriano a una reunión en el consistorio a la que asistieron el jefe de la Policía Local, Josep Miquel Duran, el jefe de los servicios jurídicos y el propio Somoza.

Sin embargo, Bustos aseguró que Soriano lo negó y le creyeron: "Yo sí que confío en la inocencia de las personas si no se demuestra lo contrario".

"Estaba tan seguro como lo estoy hoy de que no habido ningún electo ni ningún funcionario que haya cobrado ni un solo euro de nadie para modificar la voluntad de la transparencia en la gestión. Ni un solo día he dudado", contestó.

COMENTARIOS, NO PRESIONES

Preguntado por si ejerció alguna presión en la contratación de la exalto cargo del tripartito Carmina Llumà por parte de la alcaldesa de Montcada i Reixac (Barcelona), María Elena Pérez --por la que están imputados también la propia alcaldesa y el diputado del PSC del Parlament Daniel Fernández--, Bustos aseguró: "En ningún caso he tenido la percepción de haber presionado a nadie".

"No puedo ejercer ningún tipo de presión porque no me corresponde; es una responsabilidad que le compete exclusivamente a la alcaldesa, y otra cosa es que ella pida consejo o asesoramiento y pueda preguntar. Ella a mí no me preguntó", zanjó.

Sí admitió que pudo "haber hecho comentarios" después de que el juez le hiciera escuchar una decena de llamadas con su hermano y concejal, Francisco Bustos, y el propio Fernández, en la que reclamaban que al 'no apta' le quitaran el 'no' para que obtuviera el cargo.

Así, el juez le preguntó si influyó en la decisión y Bustos aseguró: "En ningún caso; solo aconsejé sobre quien me parecía la persona adecuada".

En un momento del interrogatorio, Bustos y Bermejo se enzarzaron en una discusión por la pertinencia de una pregunta --Bustos llegó a decirle que le parece irrelevante y fuera de toda lógica que le pregunten si su jefe jurídico es el marido de Llumà--, en la que media el juez y el fiscal sentenció: "Esto es un proceso penal, está usted está ante autoridades y está sometido a un interrogatorio", a lo que Bustos pidió perdón.

FAVORES A MELQUÍADES

El juez y el fiscal también interrogaron a Bustos sobre un presunto trato de favor a su tío Melquíades Garrido; en concreto, en sus gestiones para lograr la instalación de una planta de Audi en el polígono Sant Pau de Riu Sec de Sabadell que finalmente fracasaron.

"Me da igual quién se beneficia y quién no. Si él se beneficia es secundario. La que se beneficia es la ciudad", se explicó durante el interrogatorio, tras escuchar varias conversaciones telefónicas pinchadas de él con su tío en diciembre de 2011.

También le preguntaron si había dado instrucciones al director de Urbanismo para hacer un trato de favor: "No. Le dije que atienda a todo el mundo correctamente", contestó.

En la última pregunta de su interrogatorio, el fiscal cuestionó al entonces alcalde si Daniel Fernández le había avisado de que un amigo suyo le dijo que le iban a imputar de inmediato, a lo que él respondió que no lo recordaba.