Así lo ha anunciado el alcalde, José Benlloch, que ha recordado que el espacio en el que se ubica el centro educativo estaba dividido en tres parcelas correspondientes a tres propietarios distintos, con dos de los cuales ya se llegó a acuerdos en su día y tan solo faltaba esta parte, "con la que no se pudo negociar y que decidió acogerse a su derecho a llegar hasta el final en los tribunales".
"El TSJCV ha dado la razón a este propietario y ahora, ocho años después, recibimos el impacto de un nuevo fallo que recoge términos tan graves como expropiación encubierta sin pagar o permuta a la fuerza", ha apuntado el primer edil.
Según ha lamentado Benlloch, "seguimos pagando la política urbanística de Monopoly que practicaba el Partido Popular, una herencia envenenada que vamos a seguir gestionando para evitar que sea un lastre para el avance de la ciudad", y ha añadido que "por desgracia, ya tenemos demasiada experiencia en recibir malas noticias sobre urbanismo, fruto de una nefasta gestión del PP basada en construir sin pagar, en despilfarros e ilegalidades".
No obstante, Benlloch ha explicado que tanto el propietario como el Ayuntamiento "están en su derecho de defenderse", y ha anunciado que van a intentar agotar todos los instrumentos legales a su alcance. En estos momentos, según ha dicho, tan solo queda la opción de presentar un recurso ante el Tribunal Supremo, "y lo haremos, una vez estudien nuestros abogados las posibilidades que tenemos, ya que es un tema muy complicado".
NEGOCIACIÓN
Sin embargo, el primer edil no cierra la puerta a una negociación. "El propietario está muy dolido con el Ayuntamiento y nunca ha querido negociar nada y lo comprendemos, pero confío en el poder de la palabra y en que algún día podamos dialogar y solucionarlo de la mejor manera posible para todos, al igual que ocurrió con otro propietario del mismo solar, que finalmente aceptó una rebaja en el precio y el pago en varias anualidades y como ya hemos hecho en otros casos similares", ha subrayado.
Tal y como ha detallado el alcalde, la sentencia es del 31 de marzo, aunque el Ayutamiento la ha recibido estos días y "hoy mismo ha pasado por una junta urgente y la hemos remitido a los abogados para que la estudien". "Vamos a seguir defendiendo los intereses de la ciudad en todo momento", ha expresado Benlloch, quien ha lamentado que "por culpa de estos empastres y el riesgo que suponen, conseguir el equilibrio siempre será complicado".