Trinidad Jiménez pide a Hillary Clinton más implicación de EEUU en el conflicto del Sáhara

INFORMATIVOS TELECINCO/AGENCIAS 20/11/2010 14:02

Jiménez ofreció una rueda de prensa en Lisboa tras reunirse durante 40 minutos con Clinton en el marco de la cumbre de la OTAN, un encuentro en el que manifestó la "preocupación" de España por los últimos acontecimientos registrados en El Aaiún, después de que Marruecos decidiera desmantelar el campamento saharaui instalado en las cercanías de la capital de la antigua colonia española.

La ministra española propuso dar "un mayor impulso político" al diálogo que han iniciado marroquíes y saharauis y sugirió que el Grupo de Amigos "acompañen" esas conversaciones para ayudar a las partes a buscar una solución.

Clinton, según explicó Jiménez, coincidió en la importancia de que no se interrumpan esas conversaciones y valoró su propuesta, pero no adelantó una respuesta.

Las reuniones del Grupo de Amigos se convocan normalmente a nivel técnico y Jiménez consideró que en este momento "es más urgente que nunca elevar el nivel político" de esos encuentros, aunque no aclaró si su propuesta concreta es la convocatoria de una reunión de ministros de los cinco países. Quiso dejar claro que son Marruecos y el Polisario, que se volverán a sentar a negociar el 1 de diciembre, quienes deben encontrar una solución al conflicto.

Que la ONU vele por los derechos

Se mostró a favor de que se capacite a la Misión de las Naciones Unidas para el Sáhara Occidental (MINURSO) para velar por la protección de los derechos humanos en el Sáhara Occidental, reivindicación que también ha hecho pública Amnistía Internacional.

Jiménez recordó que el grupo parlamentario socialista presentó el año pasado una proposición no de ley en el Congreso de los Diputados español, apoyada por el resto de los grupos, para que la MINURSO se involucrara en la vigilancia de los derechos humanos.

Encuentro fuera de agenda

Las dos responsables de Exteriores abordaron la cuestión del Sáhara al final de su reunión, ya que no había sido incluida formalmente en la agenda del encuentro, y Jiménez explicó que no hubo un intercambio de información sobre lo sucedido en El Aaiún.

De hecho, a su juicio, "todavía es difícil en estos momentos utilizar una información que consideremos fiable" para hacer un análisis final de los acontecimientos.

El Gobierno, reiteró Jiménez, desea contar con un informe "claro e independiente" y confía en poder hacer un "balance final" de lo sucedido tras analizar todos los datos que le están llegando desde ONG, asociaciones de derechos humanos y organismos internacionales como la ONU. Los informes, añadió, tienen que ser aceptados por las partes. LA