El presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, ha censurado a Bildu que "toque la lira de la unidad abertzale, mirando al PNV", aunque ni lo "quiere ni desea", y le ha acusado de pretender "un victimismo que necesitan y buscan en la confrontación con todos". En este sentido, acusa a Bildu de practicar una "preopotencia que asusta y alarma" y recuerda tiempos que "parecían olvidados". "Prepotencia, victimismo, frentismo y necesidad de conflicto son un cóctel explosivo", ha advertido.
En un artículo publicado en su blog personal, recogido por Europa Press, Urkullu ha asegurado que los dirigentes de Bildu están "dispuestos a hacer o a decir cualquier cosa que sirva de consuelo y despiste" a todos los que le votaron y "depositaron sus esperanzas en su promesa de que iba a ser la garantía de la paz en Euskadi".
El líder nacionalista ha criticado "la incapacidad absoluta" en la gestión de los cargos de la coalición soberanista, así como su "prepotencia que asusta y alarma". "La prepotencia nunca ha sido una herramienta capaz de solucionar nada ni de inspirar soluciones", ha advertido el dirigente nacionalista, que ha lamentado esas "actitudes prepotentes que recuerdan, por desgracia, tiempos que ya parecían olvidados".
En esta línea, ha censurado al diputado general de Guipuúzcoa, Martin Garitano, sus declaraciones en las que afirmaba que "habrá un día en que todos tengamos que reflexionar" sobre "el daño" causado pero que aún "no estamos en ese tiempo". A su juicio, estas manifestaciones "no son dignas de un responsable institucional". "Prefiero seguir quedándome en que son decepcionantes y un error, a tener que decir que son un auténtico paso atrás", ha añadido.
Tras criticar que, en cuanto a la gestión, Bildu "dice lo mismo una cosa que la contraria ante la ausencia de programa, de proyectos o de iniciativas", ha censurado a la coalición que, "en dialéctica política, tocan la lira de la unidad abertzale, mirando al Partido Nacionalista Vasco", algo "que ni quiere ni desea".
El dirigente del PNV ha recordado, en este sentido, "lo sucedido con la coalición electoral PNV-EA" en las autonómicas de 2009, así como "la falta de arrojo" de la izquierda abertzale para "dar el paso que tenían que dar".
"VICTIMISMO"
Iñigo Urkullu ha denunciado la "búsqueda constante del victimismo" que "necesitan y buscan en la confrontación con todos: con el PNV, con el PSOE y con el PP" y se ha mostrado convencido de que "más de uno y más de dos dirigentes de ese mundo desean que el PP gane las próximas elecciones generales y gobierne en España".
Tras censurar que se pretenda "el enfrentamiento (bajo el disfraz de la confrontación) asegurado ante la ausencia de un proyecto de gestión y político que pueda dar coherencia y futuro a Bildu", ha resaltado que "el victimismo y frentismo" reflejan "la necesidad de conflicto permanente que tiene y necesita una parte de ese mundo para intentar seguir controlando eso que se denomina Izquierda Abertzale".
Para el presidente del EBB, "prepotencia, victimismo, frentismo y necesidad de conflicto" constituyen "un cóctel explosivo".
PROPUESTA FISCAL DEL LEHENDAKARI
Por otro lado, también ha criticado que el lehendakari, Patxi López, haya "sacado la lira de la fiscalidad". "No sé muy bien si para provocar un enfrentamiento fiscal entre las Diputaciones y despistar al personal sobre los graves problemas de incapacidad de su gobierno o porque necesitaba dinero a cualquier precio, o por las dos cosas al mismo tiempo, y tratar de conseguir, así, un liderazgo que ni tiene ni se le reconoce por la sociedad", ha apuntado.
En este sentido, ha manifestado que "el resto de los mortales" entendieron que la propuesta fiscal trasladada por el lehendakari a los diputados generales como "una subida de impuestos de forma generalizada para conseguir mayores ingresos", aunque este fin de semana López precisara, en un artículo de opinión, que "lo que realmente propuso fue que, quienes no pagan impuestos, pagasen impuestos".
Iñigo Urkullu ha denunciado que el lehendakari insinuara que "las diputaciones son unas irresponsables y que permiten y toleran el fraude fiscal a favor de los ricos y en contra del pueblo necesitado". "De demagogia en demagogia, y todo para intentarse ganar el respaldo de ese pueblo que dice defender", ha lamentado.
Urkullu ha señalado que imagina que "los casi 300 millones de euros que piensa obtener de la dilapidación del patrimonio público vasco de viviendas", permitirán que le salgan "las cuentas" para "tirar hasta el final de su mandato" y, por ello, "ya no necesita subir impuestos a todo 'quisqui'".
"Primero recurrió a la deuda, multiplicando por siete nuestro endeudamiento, una auténtica barbaridad siendo que, además, era para el gasto corriente. Luego, quiso subir los impuestos y, ahora, recurre a lo mas fácil, la venta del patrimonio", ha denunciado.