Un funcionario estadounidense cercano a las investigaciones ha contado a la cadena CNN que los últimos análisis indican que el régimen comunista sí pudo llevar a cabo una prueba --aunque fallida-- de algunos componentes de una bomba de hidrógeno.
La fuente ha explicado que las primeras pesquisas, basadas en el estudio de las partículas aéreas de la zona en la que se supone que Corea del Norte llevó a cabo la prueba, no fueron concluyentes, por lo que las autoridades estadounidenses decidieron revisarlas.
Este segundo análisis, fundado en los datos sísmicos del lugar, ha revelado que la prueba podría haber sido subterránea, aunque no con la potencia propia de una bomba de hidrógeno, por lo que sospechan que habría sido solo sobre algunos componentes.
El Gobierno de Kim Jong Un anunció el 6 de enero que había probado una bomba de hidrógeno, pero varios países, entre ellos Estados Unidos, indicaron entonces que podría formar parte de la propaganda de la nación asiática.
El portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, dijo en rueda de prensa que la investigación preliminar no indicaba que se hubiera producido una prueba armamentística de esta naturaleza.