España, en una muestra de "firmeza" contra el golpe de Estado en Honduras, ha decidido llamar a consultas a Ignacio Rupérez, embajador español en dicho país.
La decisión, hecha pública a través de un comunicado de Exteriores, se produce un día después de que el ministro, Miguel Ángel Moratinos, pidiera a los países de la UE que llamen a consultas a sus embajadores en Honduras de forma "urgente".
Con esta herramienta diplomática, los Gobiernos muestran su fuerte rechazo y malestar ante alguna actuación del Estado ante el que está acreditado el embajador al que se llama.
72 horas para la restitución de Zelaya
Por su parte, la Asamblea General de la OEA ha exigido al nuevo Gobierno hondureño la restitución del depuesto presidente Manuel Zelaya en un plazo de 72 horas. De no llevarse a cabo, Honduras se arriesga a la expulsión del organismo regional, según se ha informado.
La Asamblea ha aprobado una resolución de cinco puntos, por aclamación y ante la presencia de Zelaya, que condena el golpe militar del domingo pasado, exige la restitución de Zelaya y el restablecimiento del orden democrático y rechaza al Gobierno del nuevo presidente, Roberto Micheletti, producto de la "ruptura inconstitucional".
El depuesto presidente de Honduras, Manuel Zelaya, por su parte, ha asegurado que el golpe de Estado sufrido en el país "es un retroceso para América" y una "gran tragedia".
Al tiempo que ha elogiada la resolución de la OEA, Zelaya ha puntualizado que con la decisión del organismo los actos de denuncia "no quedarán impunes". EPF