Según publica el diario Telegraph, el responsable de Salud de Reino Unido ha querido lanzar un mensaje de tranquilidad a los donantes británicos tras el conocimiento del garrafal error del registro nacional ocurrido hace ahora una década.
"Quiero asegurar a los millones de donantes que pueden tener la plena confianza de que sus deseos serán respetados. Esto evidentemente no ha ocurrido en un pequeño número de casos en el pasado y, por ello, lamento profundamente el dolor causado a las familias", ha comentado Andy Burnham.
Ante esta situación, el secretario ha señalado que las medidas para subsanar el fallo ya se han tomado. "Hemos abierto una investigación para averiguar por qué ha sucedido esto. El proceso está en marcha y se completará lo antes posible", ha insistido.
Mientras, las familias denuncian que se han extraído órganos de sus allegados sin el consentimiento previo requerido. Estos casos, según las fuentes oficiales, se explican porque las decisiones se basaron en las informaciones erróneas de los registros suplantados.
El fallo ocurrió en 1999 cuando miles de registros del centro de donantes del país se confundieron y equivocaron los deseos de las familias.
El error salió a la luz cuando se enviaron las cartas de agradecimiento a los nuevos donantes. Los afectados dieron entonces la voz de alarma al constatar que las informaciones citadas eran totalmente erróneas. EPF