La sesión especial, convocada a petición de Costa Rica, comenzará a las 14.30 GMT y tendrá lugar en la sede de la Organización de Estados Americanos (OEA), indicó hoy el organismo interamericano.
El canciller costarricense, René Castro, anunció el lunes que acudirá a la OEA para pedirle al organismo que intervenga en lo que considera una violación de su territorio por parte del Ejército de Nicaragua en el marco del conflicto que ha estallado entre ambos países por el dragado del río San Juan, en la frontera.
El embajador costarricense ante la OEA, Enrique Castillo, cursó la petición ante el ente dirigido por el secretario general, José Miguel Insulza, ante lo cual el presidente del Consejo Permanente, el salvadoreño Joaquín Alexander Maza, procedió a convocar la reunión extraordinaria de los 33 países miembros activos.
San José presentó el 21 de octubre una queja oficial a Managua tras comprobar que Nicaragua había lanzado supuestamente a su territorio los sedimentos del dragado del río San Juan, y por una presunta incursión de militares en su territorio en días previos.
El pasado miércoles en una nota enviada por el canciller nicaragüense en funciones, Manuel Coronel Kautz, Nicaragua respondió con acusaciones sobre incursiones de efectivos costarricenses en su territorio.
Ese día, el Gobierno de Nicaragua, que entregó a los países miembros de la OEA su respuesta a Costa Rica, expresó su "más enérgica" protesta por las "reiteradas violaciones de tropas de las fuerzas armadas costarricenses a territorio nicaragüense", y rechazó que sus militares hayan ingresado en el vecino país.
La idea de Costa Rica es presentar las pruebas de la supuesta incursión de tropas nicaragüenses con cartografía, vídeos y testimonios de vecinos de la zona, y además pedir a la OEA que "compruebe en territorio la denuncia", explicó Castro el lunes.
El canciller prevé viajar hoy mismo a Washington.
Ambos países mantienen desde hace casi dos semanas tensiones por los trabajos de limpieza que Nicaragua realiza en el fronterizo río San Juan, de soberanía nicaragüense, que son dirigidos por el ex comandante sandinista Edén Pastora.
Según Costa Rica, el dragado ha lanzado sedimentos a territorio costarricense y ha causado daños ambientales en la Isla Calero (Caribe), y se confirmó la presencia de militares nicaragüenses.
Según el Gobierno costarricense, tropas del Ejército de Nicaragua instalaron un campamento e izaron una bandera nicaragüense en la Isla Calero, en territorio costarricense.
San José ha enviado una nota al Gobierno de Nicaragua en la que acepta la realización de una reunión de la comisión binacional para el 27 de noviembre "con la condición de que se suspendan las actividades que causan daño a la integridad territorial del país o al ambiente costarricense".
Por su parte, el ministro costarricense de Seguridad, José María Tijerino, ha enviado refuerzos policiales a la zona fronteriza para "resguardar la soberanía nacional" pero evitando "hasta donde sea posible" un encuentro armado.