Policía y Bomberos desaconsejaron al alcalde de Duisburgo la ubicación de la 'Loveparade'

INFORMATIVOS TELECINCO/AGENCIAS 26/07/2010 17:31

El sábado, 19 jóvenes, entre ellos dos españolas, fallecieron en una avalancha durante este festival de música y otras 511 personas resultaron heridas.

La canciller alemana, Angela Merkel, espera que haya una investigación "escrupulosa y exhaustiva" de la tragedia, según señaló este lunes en Berlín su portavoz, Ulrich Wilhelm.

"Les advertí hace un año de que Duisburgo no era un lugar adecuado para la Loveparade. Es demasiado pequeño y demasiado estrecho", explicó Wendt, que también es oficial de la Policía Nacional.

Wendt, que precisamente es natural de Duisburgo y preside un sindicato que cuenta con 170.000 afiliados, denunció que sus advertencias fueron ignoradas, pese a que las autoridades de otra ciudad en tamaño comparable a esta, Bochun, escucharon las advertencias de la Policía en 2009 y cancelaron la celebración de la Loveparade en ella el año pasado.

La codicia de la alcaldía pudo llevar al desastre

El diario Spiegel online escribe que a la organización se le permitió, no cumplir con la normativa que prescribe el ancho de los caminos de evacuación y de planificar la presencia del cuerpo de bomberos.

De hecho, los bomberos de Duisburgo habían advertido sobre los riesgos ya que en octubre de 2009 comunicaron a la alcaldía lo peligroso que era guiar a la multitud a través del túnel, según publica el diario Kölner Rundschau.

La alcaldía de Duisburgo, a cuyo frente está Adolf Sauerland está pues en el centro de mira. En su única presentación ante la prensa, el alcalde negó que el gobierno que lidera tenga responsabilidad alguna en lo ocurrido. Según manifestó, la estampida de gente "no se debió a que el concepto de seguridad no haya funcionado, sino posiblemente a debilidades individuales".

Del mismo modo, la empresa organizadora del festival declinó, por su parte, cualquier responsabilidad: "La seguridad acordada con la policía y con la ciudad no dejó lugar a ningún tipo de inquietud", dijo el empresario Rainer Schalle, dueño de la sociedad que desde 2006 organizaba el festival.

Sin embargo, la policía ha negado haber participado en la seguridad del evento: "La policía no tiene ninguna responsabilidad. Obviamente la organización presenta la seguridad para su evaluación, pero que se acepte o no depende de otras instancias. La policía no tiene poder de veto", señaló al diario "Bild" el jefe de la policía, Reiner Wendt.

Posibles cargos de homicidio por negligencia

Los investigadores están valorando posibles cargos de homicidio por negligencia y el fiscal del estado en Duisburgo, Rolf Haferkamp, dijo que examinará los planes de seguridad y por qué un acontecimiento previsto para 250.000 personas terminó contando con una asistencia de entre 500.000 y un millón.

"Tendremos que examinar detenidamente esa cuestión pero ahora es demasiado pronto para tomar una decisión sobre si una persona en concreto será responsabilizada", indicó Haferkamp a la cadena N-24.