El ministro de Gobierno, Jorge Pérez, ha anunciado la creación de un nuevo cuerpo policial que dependerá de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (FELCV), que actualmente cuenta con 84 oficinas en todo el país.
"Inmediatamente se reciba la denuncia, hay la orden de que se reaccione, se vaya a buscar a la víctima y a detener al agresor, al cobarde, al golpeador", ha explicado, advirtiendo de que, "si (los agentes) no lo hacen, pueden ser denunciados e investigados".
Por su parte, el comandante nacional de la FELCV, el coronel Rosa Lema, ha detallado que para acelerar la respuesta policial los agentes se moverán en motocicletas, aunque para ello tendrán que hacer nuevas adquisiciones.
"No tenemos motocicletas, (solo) cuatro vehículos, equipamiento para este grupo (tampoco) tenemos, pero nos organizamos", relató el director de la FELCV en el departamento de La Paz, el coronel Franklin Llanos.
Además, Pérez ha adelantado que, una vez sean detenidos, "se va a presentar públicamente (a los agresores) para que el país conozca a los golpeadores de mujeres", según ha informado el diario boliviano 'La Razón'.
Sin embargo, esta medida podría presentar algunos problemas legales. "La Ley 348 penaliza la agresión física a una mujer, pero (el golpeador) no puede ser expuesto sin su consentimiento, se presume su inocencia en tanto no exista sentencia ejecutoriada", ha aclarado el abogado penalista Milton Mendoza.