"No podemos abstraernos del empeoramiento de la situación humanitaria en Burundi", ha dicho el comisario de Ayuda Humanitaria, Christos Stylianides, quien ha alertado de que el número de refugiados no cesa de aumentar desde hace tres meses.
"Es especialmente preocupante en una región ya de por sí frágil", ha añadido, para después confiar en que esta ayuda permita a los países de la región atender las necesidades más urgentes de los más de 175.000 refugiados que han escapado de Burundi, en su mayoría mujeres y niños.
Bruselas ya había comprometido apoyos a esta crisis, con lo que la ayuda humanitaria se eleva a 9 millones de euros en total desde abril para los refugiados, en una región, Los Grandes Lagos, en donde el Ejecutivo comunitario avisa de que la capacidad de varios campos de refugiados se ha sobrepasado y hay "riesgos sanitarios.
La mayoría de los burundeses huidos han encontrado refugio en Tanzania (80.000) y Ruanda (más de 71.000), aunque también han sido acogidos por miles en República Democrática del Congo y en Uganda.