Cameron promete aplacar la ola euroescéptica que ahonda en las filas conservadoras

EUROPA PRESS 23/10/2011 03:59

Inmerso en un debate interno sobre si secundar el lunes en el pleno de la Cámara de los Comunes la iniciativa de someter a votación popular la pertenencia de Reino Unido a la UE, Downing Street ha emitido un comunicado en el que asegura que Cameron no cederá ante los euroescépticos.

Cameron ordenará a sus diputados que rechacen la moción y ha advertido a aquellos que le desafíes que sus aspiraciones de promoción dentro del partido podrían verse afectadas.

El diario británico 'The Guardian' calcula que hasta 60 diputados 'tories' han mostrado su apoyo al referéndum. De hecho, un exlíder conservador, diputado y exministro, David Dvies, ha clamado a favor de la votación, acusando a la coalición de Gobierno formada por conservadores y liberaldemócratas de temer que el resultado sea un sí a la salida de Reino Unido de la UE.

"No niege el derecho de la gente a contestar la pregunta solo porque usted teme cuál puede ser la respuesta", afirma Davis, en una misiva dirigida a Cameron.

"DISTRACCIÓN"

En este sentido, el presidente del comité de la administración pública, el 'tory' Bernard Jenkin, ha sostenido que si Cameron no sigue adelante con la votación, el Partido Conservador se convertirá en un actor "irrelevante a los ojos de los votantes", que están muy preocupados por el devenir de la UE.

Asimismo, a estas declaraciones se le ha unido la del mayor partidario británico a la adhesión de Reino Unido al euro, lord Turner, que ha reconocido que "se equivocó" al abogar por entrar en la eurozona, en una entrevista con el periódico británico 'The Observer'.

No obstante, Downing Street ha señalado que Cameron comprende esta ola de euroescepticismo en sus filas y que luchará por la recuperación de los poderes en manos de la UE tras la entrada en vigor del Tratado de Lisboa.

Pero en una coyuntura de crisis, apunta el comunicado, Reino Unido tiene que jugar su papel en este momento, poniendo en orden, antes que distrayéndose con un referéndum.

El líder del Partido Liberal Demócrata, Nick Clegg, también ha reincidido en este punto al describir dicha hipótesis como "una peligrosa forma de distracción".