Así se lo hizo saber Clinton al presidente, Mwai Kibaki, quien no podrá comparecer por ley al haber cumplido el máximo de dos mandatos impuesto por la Constitución-- y al máximo favorito para asumir el poder, el actual primer ministro Raila Odinga.
"Estados Unidos se ha comprometido a ayudar al Gobierno de Kenia para que las próximas elecciones sean libres, justas y transparentes", declaró Clinton. "Pedimos que la nación se una y prepare unas elecciones que supongan un modelo para el mundo entero" añadió en los prolegómenos de la gira que llevará a la secretaria por siete países africanos.
Precisamente fueron los simpatizantes de Kibaki y Odinga quienes en 2007 comenzaron los enfrentamientos que degeneraron en una matanza étnica, al ser incapaces de trasladar sus diferencias a los juzgados.
En este sentido, Clinton se declaró animada por la nueva Constitución Keniana, promulgada en agosto de 2010, que concede a la Judicatura "importantes responsabilidades".