En unas declaraciones concedidas durante su visita, Kim ha destacado que "la terminal se ha acondicionado de forma moderna", resaltando que se construirá un ferrocarril de alta velocidad y una autopista para conectarla con la capital.
Asimismo, ha expresado su "gran satisfacción" por el resultado de las obras y ha lamentado no haber podido realizar la visita con su padre, Kim Jong Il, fallecido en diciembre de 2011.
La nueva terminal, que acogerá unos pocos vuelos, abrirá sus puertas el 1 de julio, en medio de los intentos de las autoridades por potenciar el turismo en el país, uno de los más aislados del mundo.
La mayoría de los vuelos que operan cubren la ruta entre Pyongyang y Pekín y llevan a turistas chinos y funcionarios y empresarios norcoreanos. Kim tiene entre sus objetivos dinamizar la economía del país, y para ello ha puesto sus ojos en el sector turístico.
En abril, el Gobierno declaró una segunda zona turística internacional en Mubong, ubicada en la provincia de Ryanggang, que se unió así a la del monte Kumgang-Wonsan, creada en junio de 2014.