En su comunicado, en el que ha condenado además los ataques perpetrados por el grupo yihadista Estado Islámico contra las terminales petroleras de Es Sider y Ras Lanuf, ha recalcado que "los extremistas violentos amenazan a todos los libios".
"Con sus ataques contra campos petroleros, amenazan los recursos que pertenecen al pueblo libio y que todos los libios deben trabajar para proteger para las próximas generaciones", ha agregado.
Asimismo, ha subrayado que "estos incidentes recalcan la necesidad urgente de que los nuevos líderes de Libia formalicen el Acuerdo para un Gobierno Nacional, contemplado por el Acuerdo Político para Libia".
El Estado Islámico, que ha reclamado la autoría del atentado, ha asegurado a través de una página utilizada por la formación que el terrorista suicida que ha empotrado un camión cargado de explosivos contra las instalaciones era un ciudadano tunecino, identificado como Abu Yakin Tinisi.
El atentado, dirigido contra un centro en el que había cientos de reclutas, es el más mortífero registrado en Libia desde la caída de Muamar Gadafi en 2011.