El Ejército creó una zona de 500 metros de ancho y 14 kilómetros de largo después de que una treintena de soldados muriesen en un ataque islamista en el Sinaí el mes pasado. Sin embargo, y tras descubrir nuevos túneles de entre 800 y 1.000 metros que comunican con la Franja de Gaza, las autoridades han decidido duplicar la distancia de seguridad, informa el periódico estatal 'Al Ahram'.
El Gobierno cifró en 1.156 el número de familias que debían abandonar sus viviendas a raíz de la primera medida establecida. De las 802 casas que el Ejército tenía previsto demoler, sólo quedan en pie casi un centenar que serán derribadas en los próximos dos días.
Las autoridades han prometido a estas familias evacuadas una compensación, aunque algunas de ellas se han quejado de que han recibido la orden con poca antelación y de que el dinero prometido no cubre los gastos.