El ejecutado, identificado como Salih bien Yatim bin Salih al Qarni, fue arrestado en relación con otros cargos y mató al soldado y a un agente de la Comisión para la Promoción de la Virtud y la Prevención del Vicio, conocida como 'policía religiosa', cuando era trasladado en vehículo.
Según estas informaciones, que no detallan cómo obtuvo el arma ni dónde o cuándo tuvo el suceso, Al Qarni "se vistió de mujer" para intentar escapar, si bien fue arrestado poco después.
De esta forma, asciende a cerca de 70 el número de ejecutados en el país en lo que va de año. Delitos como la violación, el asesinato, la apostasía, el robo a mano armado y el tráfico de drogas pueden ser castigados con pena de muerte, si bien varias personas han sido ejecutadas también bajo la acusación de brujería.