Zelimhan Bakaev, de 26 años, no ha sido visto desde el pasado 8 de agosto. Estrella del pop en Rusia, ni sus amigos ni sus familiares han tenido noticias de él desde entonces. Su rastro se desvaneció, al igual que su cuenta en Instagram, cerrada sin previa explicación.
Ahora, más de dos meses después, sus amigos, tal y como recogen varios medios, temen que haya sido torturado y asesinado en Chechenia por el mero hecho de ser gay.
Según apunta el diario Metro, Igor Kocketkov, fundador de la red LGBT en Rusia previamente había firmado: “A finales de agosto recibimos la confirmación de nuestra sospecha de que Bakaev había sido detenido por las autoridades de Chechenia debido a su homosexualidad”.
No obstante, por otro lado, un alto funcionario checheno, ante las preguntas sobre su desaparición habría llegado a decir que estaba “a salvo”, y más tarde diversos medios de la citada región habrían apuntado a que se mudó a Alemania, una información que no ha sido verificada, indica Metro.
Así las cosas, lo cierto es que las dudas sobre su paradero apuntan cada vez con más fuerza hacia un final trágico, e incluso, más allá, a que ha sido objeto de una “purga anti-gay” en un lugar que está en la mira de numerosas organizaciones de defensa de los derechos humanos, que denuncian y aseguran que en la región se llevan a cabo persecuciones, torturas y asesinatos indiscriminados de homosexuales.