Un hombre de 32 años, Michele De Matteis ha fallecido esta noche en la ciudad italiana de Lecce (sur de Italia) al explotar una bomba casera que estaba fabricando y que, según las primeras investigaciones, estaba dirigida a uno de los negocios de la zona, según informa el diario 'La Stampa'.
Los agentes de la Policía italiana han afirmado que durante la fabricación de la bomba, la víctima habría provocado accidentalmente una llama que ha causado la deflagración posterior. La Policía ha encontrado el cadáver carbonizado en la entrada de una tienda 'Sogni', que, según los investigadores, sería el objetivo de la bomba.
El cadáver de la víctima ha sido recuperado por los bomberos y, posteriormente, se le realizará la autopsia. La explosión ha provocado numerosos daños a las estructuras adyacentes, aunque todavía no se han encontrado nuevas víctimas.
Según los investigadores, De Matteis habría intentado provocar daños en las estructuras para extorsionar a los propietarios de algunas tiendas, informa el diario 'La Repúbblica'.