Las operaciones han sido realizadas de manera conjunta por la Policía, el Ejército y el servicio de Inteligencia afganos (la Dirección Nacional de Seguridad). En un comunicado, el Ministerio del Interior afgano ha dicho que las bajas talibán se han registrado en operaciones en las provincias de Laghman, Jawzjan, Kandahar, Zabul, Kunar, Parwan, Kapisa y Helmand.
Además, las fuerzas de seguridad se han incautado de diversos tipos de armas ligeras y pesadas, así como explosivos y artefactos para detonarlos. Por su parte, el Ministerio de Defensa ha elevado el balance de las operaciones a 52 milicianos talibán muertos y 38 heridos.
En este sentido, ha explicado que el Ejército afgano ha confiscado 82 artefactos explosivos improvisados (bombas artesanales, más conocidas por siglas en inglés IED).