El escándalo se destapó la semana pasada, cuando la Fiscalía General denunció que había recibido presiones de Wang para que no apelara la sentencia absolutoria del legislador del opositor Partido Democrático Progresista Ker Chien Ming, acusado de ruptura de la confianza.
El presidente taiwanés, Ma Ying Jeou, ha ordenado expulsar a Wang del Kuomitang al considerar que se trata de "uno de los casos más graves de violación de la independencia del Poder Judicial en Taiwán", de acuerdo con la agencia de noticias oficial, CNA.
Wang ha negado las acusaciones y ha adelantado que recurrirá ante los tribunales de justicia su expulsión del partido gobernante. Si finalmente se confirman los cargos, tendrá que dimitir como presidente del Parlamento.
Wang es uno de los políticos más influyentes de Taiwán porque sus 14 años como jefe de la sede legislativa le han servido para crear una amplia red de contactos entre los parlamentarios oficialistas y opositores.
Este caso podría llegar a dividir al Kuomitang, entre los partidarios de Wang y los de Ma. De momento, el secretario general de la Presidencia, Lo Chih Chiang ya ha dimitido, según ha explicado, por varios factores y entre ellos la expulsión de Wang.