Asimismo, ha pedido a todos los ciudadanos "que respeten la ley y la calma" y que "expresen pacíficamente sus opiniones respecto a los ataques contra los símbolos sagrados y las ofensas contra el profeta Mahoma", según ha informado la agencia estatal tunecina, TAP.
Por último, ha reiterado su compromiso "total" con la protección de las embajadas y las misiones diplomáticas en el país, así como su "determinación" a la hora de hacer cumplir la ley.
Cientos de personas han asaltado este viernes la legación norteamericana para protestar por la película 'Inocencia de los musulmanes', en la que se parodia al profeta Mahoma y que ha desatado la ira de grupos radicales en 32 países. El ataque se ha saldado con la muerte de dos personas y otros 29 heridos.
Los agentes de las fuerzas de seguridad han realizado disparos al aire y lanzado gases lacrimógenos para tratar de contener a los manifestantes, descritos por la agencia oficial de noticias TAP como "salafistas". Varios policías han sufrido heridas en el marco de estos choques.
Dentro del complejo, los manifestantes rompieron ventanas, quemaron vehículos y lanzaron artefactos incendiarios y piedras contra la Policía. Varios de ellos retiraron la bandera estadounidense y la sustituyeron por otra de fondo negro con una declaración islámica. Uno de los asaltantes arrojó un ordenador desde la ventana, mientras que otros abandonaron la Embajada con equipos informáticos y teléfonos.
Cuando se produjo el ataque, en la legación no estaba ninguno de sus trabajadores, según ha informado un portavoz de las fuerzas de seguridad tunecinas. En el marco de estas protestas, los manifestantes han prendido fuego a la Escuela Americana en la capital tunecina, centro que también estaba cerrado.
Las fuerzas de seguridad han detenido a unas 60 personas por su participación en los disturbios, según ha constatado un testigo de Reuters presente en la zona, donde se coreó "Obama, Obama, todos somos Usamas", en referencia al fallecido líder de Al Qaeda Usama bin Laden.