El Gobierno anuncia una política penal específica para Córcega ante el aumento de los homicidios

EUROPA PRESS 17/10/2012 15:35

Según ha indicado Ayrault al término del consejo de ministros, entre 2011 y lo que va de 2012 ha habido 37 asesinatos en la isla, el último de ellos el del abogado Antoine Sollacaro este martes en Ajaccio, y un total de 117 atentados o tentativas de atentado.

Para Ayrault "esta situación es insoportable" por lo que "el Gobierno está determinado a actuar con la mayor firmeza" contra la "plaga" que constituye para Córcega el "crimen organizado desde hace años". En este sentido, ha anunciado que el Gobierno se dispone a elaborar una "directiva de política penal" específica para Córcega, como la adoptada recientemente para combatir la delincuencia en la ciudad de Marsella.

Además, ha señalado que ha pedido a la ministra de Justicia, Christiane Taubira, y al de Interior, Manuel Valls, que elaboren una serie de "propuestas sobre la estrategia global de lucha" contra la delincuencia en la isla. Ayrault reunirá asimismo la próxima semana a varios de sus ministros para abordar específicamente este tema y "definir el plan de acción a adoptar".

Por su parte, el presidente francés, François Hollande, ha subrayado durante el consejo de ministros que la violencia que se vive en Córcega no es "aceptable en ningún modo" en Francia, según ha informado la portavoz del Ejecutivo, Najat Vallaud-Belkacem.

El presidente ha dicho que aunque la violencia "no es nueva" en la isla actualmente está vinculada a "redes, clanes, arreglos de cuentas con un número de muertos que no deja de aumentar.

Entretanto, el ministro del Interior había manifestado esta mañana su voluntad de hacer frente a la "mafia que gangrena la sociedad corsa" en reacción al asesinato del abogado. "Nos enfrentamos a una situación de extrema gravedad", ha reconocido, al tiempo que ha adelantado su intención de viajar a Córcega junto a la ministra de Justicia.

Según Manuel Valls, en Córcega con las "tradicionales reivindicaciones nacionalistas" se mezclan "intereses económicos y vínculos con la gran delincuencia". Aunque, ha reconocido, "quizá hagan falta aún más investigadores y magistrados, una mayor coordinación sobre el terreno de los investigadores y magistrados puede conseguir este objetivo" de acabar con "esta mafia".