La policía acudió a casa del individuo alertada por una ex novia que acababa de mantener una acalorada discusión con él y que logró escapar.
Al abrir la puerta de su domicilio el hombre disparó tres veces con una escopeta de caza sobre uno de los agentes que murió en su traslado al hospital.
Antes de atacar al policía, había matado a su hijo de 15 años en la localidad de Vlijtingen, cercana a Bilzen.
Una unidad de intervención especial de la policía rodeó el bloque donde vivía el hombre y al acceder a la vivienda algunas horas después descubrió su cadáver.