Estas fuentes han apuntado que un artefacto explosivo casero ha estallado cuando se abría la puerta exterior de la vivienda de Wardak, hiriendo además a otras diez personas que se encontraban en la zona, tal y como ha recogido la cadena de televisión local Tolo TV.
"Salió de su coche y alguien le estaba dando la mano cuando tuvo lugar la explosión. Me acerqué y vi al parlamentario tirado en el suelo. Le subimos herido a un coche. Había seis o siete policías heridos", ha relatado un testigo.
Por el momento ningún grupo ha reclamado la autoría del atentado, si bien las autoridades achacan este tipo de ataques a la insurgencia talibán.
Horas antes, al menos siete personas murieron y 23 resultaron heridas en un ataque talibán contra un tribunal en el este de Afganistán en represalia por la ejecución de seis milicianos el pasado mes de mayo.
Los responsables fueron dos hombres armados que abrieron fuego contra un tribunal en la localidad de Pul-e-Alam, en la provincia de Logar. Entre los fallecidos se encuentra el recién nombrado magistrado jefe del Tribunal de Apelaciones.
La Misión de Asistencia de Naciones Unidas para Afganistán (UNAMA) ha condenado este último atentado, reclamando a las autoridades que "hagan todo lo posible para garantizar la protección de los funcionarios judiciales y otros civiles que buscan acceder a estas instituciones".
"Los funcionarios judiciales y otros civiles nunca pueden ser considerados combatientes, y no deben ser atacados", ha recordado el representante especial de la Secretaría General de la ONU para el país y jefe de la UNAMA, Nicholas Haysom.