El suceso ha tenido lugar horas después de que tres policías murieran a causa de la explosión de una bomba al paso de su vehículo blindado en el norte de la península del Sinaí, un ataque que ha sido reivindicado por la filial en la zona del grupo terrorista Estado Islámico.
El norte del Sinaí es uno de los puntos con mayor actividad de milicianos islamistas contra las fuerzas de seguridad egipcias desde mediados de 2013, cuando el entonces jefe del Ejército, el general Abdelfatá al Sisi, dio un golpe de Estado que puso fin al mandato del entonces presidente de Egipto, Mohamed Mursi.
El portavoz del Ejército, Mohamed Samir, ha anunciado este mismo lunes la muerte de 57 presuntos milicianos en las operaciones llevadas a cabo por las fuerzas de seguridad en los últimos diez días.