Según las informaciones facilitadas por el Observatorio Sirio por los Derechos Humanos, con sede en Londres y una amplia red de informantes en el país árabe, un terrorista del grupo se ha inmolado frente a una escuela de la ciudad.
El atentado ha desencadenado un duro enfrentamiento entre las YPG y los yihadistas que se ha saldado con la muerte de al menos tiente miembros del Estado Islámico.
Las YPG se hicieron con el control de la ciudad el lunes, y activistas locales han denunciado que desde entonces han sido arrestadas unas 150 personas acusadas de ser integrantes de la formación yihadista o cooperar con ella.