"Esta nueva pérdida de un colega es desoladora, y prueba una vez más la crueldad con la que se está atacando la atención sanitaria en Yemen", ha lamentado la coordinadora de emergencias de MSF, Teresa Sancristóval. "La gente sufre este tipo de violencia a diario, y no se salva nadie, ni siquiera el personal sanitario", ha concluido.
La ambulancia, del hospital de Al Humhury de Saada, fue alcanzada en la tarde de ayer mientras llegaba a una zona que había sido bombardeada varias veces unos minutos antes. Los cazas volvieron a fijar su blanco en dicho sector, aunque varios vecinos se habían acercado a atender a las víctimas.
También se registraron bombardeos en Baqim y Al Jawf, dos localidades cercanas a esa zona. Aún no se conoce con exactitud el total de víctimas de todos los ataques, aunque miembros de MSF han atendido a 40 personas. Según la organización, los equipos de MSF y del Ministerio de Salud están trabajando al máximo de su capacidad en el hospital de Al Jumhoory.
A principios de mes, el hospital de Shiara, respaldado por MSF, recibió un ataque en el que murieron seis personas y otras siete resultaron heridas.