Al parecer, una bomba de fabricación casera ha estallado al paso de un vehículo policial. Las autoridades turcas ya han puesto en marcha un operativo antiterrorista para localizar a los culpables.
El atentado ha tenido lugar en el sureste de Turquía, escenario de enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y los rebeldes del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).
Turquía ha sufrido varios ataques terroristas en el último año que el Gobierno ha atribuido a los insurgentes del PKK y a los milicianos del Estado Islámico.