El primer ataque se produjo hacia las 12:00 horas cuando un autobús de línea que iba de Beersheva a Eilat, en el mar Rojo, fue disparado por hombres armados que circulaban en un coche. Al menos diez pasajeros resultaron heridos de carácter leve y moderado en este suceso.
Poco después, soldados israelíes llegados a la zona mantuvieron un tiroteo con los presuntos atacantes del autobús muy cerca del lugar donde se había producido este ataque, abatiendo a al menos tres terroristas, según el diario 'Yediot Ahronot'.
Entretanto, otro autobús de línea fue objeto de un nuevo ataque, en el que resultaron heridas de gravedad cinco personas. Además, varios proyectiles de mortero fueron disparados desde el otro lado de la frontera egipcia y una bomba estalló al paso de un vehículo del Ejército, provocando también varios heridos, según el Ejército.
Según ha informado el portavoz del Ejército israelí, el general de brigada Yoav Mordechai, al menos cinco soldados han resultado heridos en el primero de los ataques, cuatro de ellos de carácter moderado. Según el portavoz, los ataques forman parte de "un acontecimiento grave y complejo", por lo que ha pedido a la población que se mantenga alejada de la carretera entre Eilat y Ovda.
Por su parte, el ministro de Defensa, Ehud Barak, ha mantenido una reunión con altos cargos del Ejército y otras fuerzas de seguridad en Tel Aviv para evaluar la situación. A continuación, se ha reunido también con el primer ministro, Benjamin Netanyahu, para informarle de la situación.
Posteriormente, Barak ha denunciado que los "ataques terroristas se originaron en Gaza", dando a entender que el grupo islamista Hamás, que gobierna de facto este territorio desde junio de 2007, está detrás. En este sentido, según recoge el 'Yediot Ahronot', ha asegurado que el Gobierno israelí "agotará todas las medidas contra ellos".