El coordinador de la ONG Organización Popular para la Paz, Evariste Kasali, fue asesinado a tiros la semana pasada en su domicilio. El activista era un reputado defensor de los Derechos Humanos que trabajaba en casos de secuestros y violaciones de niños en Kavumu.
El Director de la Oficina Conjunta para los Derechos Humanos, José María Aranz, ha destacado que el suceso "demuestra una vez más las riesgos que enfrentan los defensores de los Derechos Humanos por la labor que realizan".
Por ello, ha reclamado la adopción urgente de un convenio marco nacional para la protección de esas personas. El domingo, las autoridades de Kivu Sur hicieron pública una regulación que dará cierta protección judicial a periodistas y activistas en riesgo.