"El número de demoliciones en las primeras seis semanas de 2016 es muy alarmante", ha dicho, resaltando que "más de 400 palestinos se han visto desplazados de sus viviendas, lo que es la mitad del total de desplazados en 2015".
La ONU ha indicado que, hasta el 15 de febrero, las fuerzas israelíes han destruido, desmantelado o confiscado 283 viviendas y otras estructuras, desplazando a 404 palestinos, entre ellos 219 niños, y afectando a 1.150 palestinos en total.
Así, ha apuntado que más de cien de las estructuras demolidas fueron entregadas como ayuda humanitaria a familias necesidades, frecuentemente a causa de otra demolición previa.
"La mayoría de las demoliciones en Cisjordania tienen lugar bajo la espuria base legal de que los palestinos no poseen permisos de construcción, pero en el Área C los datos oficiales israelíes indican que sólo el 1,5 por ciento de las solicitudes palestinas son aprobadas", ha valorado Piper.
Por su parte, el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, ha tildado de "restrictiva y discriminatoria" la política de planificación israelí en Cisjordania, tal y como ha indicado el organismo en un comunicado.
"El Derecho Internacional es claro. Los palestinos de Cisjordania tienen derecho a una vivienda adecuada y a recibir ayuda humanitaria. Como potencia ocupante, Israel debe respetar estos derechos", ha remachado Piper.