Los diputados han avalado la recomendación del Consejo de Seguridad Nacional y la orden del Gobierno y han dado su visto bueno a la prórroga. "El estado de emergencia no es ninguna fantasía para Turquía o una medida para que el Gobierno se lave las manos", ha esgrimido el viceprimer ministro Numan Kurtulmus, según el periódico 'Hurriyet'.
Kurtulmus ha añadido que es "una cuestión de supervivencia para Turquía", comprometida en la lucha "contra todas las organizaciones terroristas". "No es sólo una cuestión del Gobierno", ha declarado el portavoz.
El Ejecutivo ha atribuido la intentona golpista a una red dirigida por el clérigo Fethulá Gulen, exiliado en Estados Unidos. En el marco de la lucha contra esta supuesta trama, las autoridades han detenido o cesado a decenas de miles de personas, lo que ha generado las suspicacias de la oposición de y gobiernos occidentales.