Los comandantes han sido identificados como Yeon Jae Wook y Ok Do Kyung, y junto a ellos han sido acusados otros funcionarios retirados o en funciones, que hacen frente a cargos "por violar las normas que estipulan su obligación de permanecer neutrales".
Tras meses de investigaciones, el Gobierno ha indicado que "los oficiales del comando de guerra psicológica publicaron alrededor de 7.100 contenidos a favor o en contra de varios partidos o políticos, lo que va más allá de los límites de las operaciones normales".
"Yeon y Ok están acusados de colaborar en la intervención política por su fracaso a la hora de tomar medidas, a pesar de que fueron notificados de estas operaciones ilegales", ha agregado, según ha informado la agencia surcoreana de noticias Yonhap.
En junio de 2013, la Fiscalía de Corea del Sur acusó al exjefe del Servicio Nacional de Inteligencia (NIS) Woon Sei Hoon de un delito de intromisión en las elecciones presidenciales en el marco de este mismo caso.
El Ministerio Público sostuvo que Won intervino de forma sistemática y exhaustiva en la política nacional, violando con ello el reglamento interno del NIS y la Ley Electoral de los Servidores Públicos.
En concreto, se sospecha que ordenó a agentes del NIS que publicaran en Internet una gran cantidad de comentarios para influir en la opinión pública a favor de la actual presidenta de cara a los comicios.